lunes, 16 de mayo de 2011

BANSKY. Exit through the gift shop (o la facilidad de crear mitos artísticos)

Documental firmado por el grafitero más famoso e, irónicamente, más anónimo del mundo.
Dirección: Bansky
Año: 2009
País: EE.UU
Duración: 88 m aprox
Idiomas: Inglés (sub. en castellano)
Precio: 13,99 €



Imágenes y testimonios reales de la denominada tras el posmodernismo "bad culture", nos hablan aquí del controvertido mundo del arte urbano, exactamente del graffiti, pero también de otras realizaciones plásticas que se efectúan en las paredes de las ciudades de forma anónima o bajo una firma, símbolo o señal característica. La práctica del arte grafitero - la ley lo llama incivismo público - siempre ha sido perseguido y castigado. Su polémico desarrollo en las últimas décadas- unido a propósitos de crítica social política en el contexto de un alternativa cultural- nos lleva a indagar en su no muy lejano origen. En la primera mitad del siglo XX, artistas como Dubuffet ya dio carta blanca al asunto, más tarde vino seguido por nombres como Haring o el famoso Basquiat.


Haring

Basquiat

Surgido en las paredes de las calles, este Street ART del que hablamos, marca un discutido itinerario, en el que las obras creadas por la influencia de la bad culture , se han integrado en el universo de la cultura convencional, en las galerías, en los museos, y por lo tanto, (quizás con un poco de ironía) en la rueda de los productos de industria generadores de dinero.

El documental tiene un buen montaje, un excelente ritmo y un sin fin de imágenes de un arte muy cínico en según que momentos. El argumento versa sobre el arte urbano y desemboca en una ácida reflexión sobre la mentira y falsedad  en el mundo del arte contemporáneo, sobre la facilidad de improvisar mitos artísticos, dar gato por liebre explotando la fe ciega del rebaño en masa que acoge y aplaude acríticamente cualquier "novedad" con la etiqueta de lo más cool y moderno.

Bansky, que en ningún momento aparece a rostro descubierto, habla a cámara, trabaja en su taller, nos muestra el mundo del arte ilegal de las calles, y nos presenta al personaje Thierry Guetta, un supuesto tipo que filma a los grafiteros, y luego se constituye con su material en un artista de éxito. Digo "supuesto" porque tampoco nadie sabe quien es el tal Thierry Guetta, y aquí podríamos estar hablando de una creación inventiva e instrumental del propio Bansky como medio promocional de su obra, y formular así su discurso-ensayo que conllevaría inscribir esta película en lo que se dice "falso documental". Aún así, la película también recoge entrevistas a los artistas Shephard Fairey y Space Invader, que nos comentan como su trabajo empezó a tomar forma tras el descubrimiento del artista francés Blek le Rat, famoso por su técnica del estarcido (pintura mural sobre plantillas).


Blek le Rat


Bansky es anónimo no por que no pudiera soportar el peso de la fama, o no porque no quiera ser quizás rico, sino porque sabe que su trabajo está considerado por las autoridades puro vandalismo, y que sus críticas y sus sarcasmos serían dignos de prisión en casos extremos.

Bansky ...o cualquier otro.
Muchos consideran su apropiacionismo como conceptualmente vago, recalcando que la ironía o cierto juego perspicaz, no le convierte en artista. También existen quejas sobre la plasmación de sus ideas anti-sistema y anti-capitalismo en fachadas de edificios o lugares cuyos habitantes no las comparten. No obstante, su arte de revolución, su "daño criminal" influenciado por la culture Jamming (movimiento que deforma imágenes de anuncios publicitarios mayoritariamente para transformar en otro el mensaje) y por artistas posmodernos de la talla de Richard Prince con su obra sobre los cowboys de la campaña publicitaria de Malboro; sigue siendo una forma de escupir un claro mensaje a la cara de una cierta burocracia, de abofetear la mejilla rosada de algún capitalista por las noches, mientras pasa desapercibido por su lado de día. Un mensaje revolucionario es un mensaje revolucionario, y el trabajo de Bansky, junto con su estética y hasta me atrevería a decir la palabra cierta originalidad, para mí, lo es.


Prince

Bansky

¿Todo graffiti en la calle es arte? No a mi ver, pero a mi ver, tampoco toda pieza que se encuentra dentro de un museo lo es. ¿Bajo que criterio elegir cuales sí y cuales no? eso ya es la historia de la pregunta del millón de dólares...

Aquí os dejo el trailer: (el documental fue premiado en el Festival de cine Sundace)




"Ars longa, vita brevis"

lunes, 9 de mayo de 2011

RIMBAUD/VERLAINE

Total eclipse. A. HOLLAND, 1995.

VERLAINE: - ¿De qué tienes miedo?
RIMBAUD: - De que me vean como yo les veo a ellos.





"Ars longa, vita brevis"

sábado, 7 de mayo de 2011

NUBES DE SALSA DE SOJA QUE SABEN A ERIC BURDON

Hoy no ha brillado el sol, y lo he notado, en lo bueno y en lo malo. Hoy corría el aire fresco, hoy el viento despeinaba. Hoy ha sido un día que ha empezado con café, como todos. Tras una ardua, pero al fin concluida, mañana cyberpunk, ha venido una tarde solitaria tras unos spaghettis. Una tarde de echarte de menos, una tarde de tocadisco, de dejar que la voz de Burdon y de Strummer me desgarraran los oídos de la forma más maravillosa posible, una tarde de té helado y artículos.

Pero no había té en casa, he tenido que ir al supermercado.
El supermercado siempre me ha parecido un lugar de tránsito enorme. Puedo pasarme horas dentro de un supermercado dando vueltas como una idiota (hago un paréntesis porque esto me acaba de recordar a Lost in the supermarket de The Clash).


El super me fascina, todo lo que hay dentro de él, tantas marcas de una misma cosa, tantos precios distintos, tantos sabores para un mismo poema. Si lo piensas bien, ¿Qué es un supermercado sino una exposición del producto al mejor postor? ¿Qué es la calle, la acera, pues sino, que una estantería donde los productos frescos pasean ,vienen y van, arriba y abajo? Ir al supermercado es la vida misma. Lo barato sale caro, malo para mi, pero en el buen sentido para otro, y sino que se lo digan al artista posmoderno Andreas Gursky que su fotografía denominada 0,99 se vendió en una subasta de Sotheby's por 2,54 millones de euros, siendo la más cara de la historia.

0,99 centavos. GURSKY.

Y el sentimiento que a mi me transmite un supermercado - a otra gente le pasa con los aeropuertos, las oficinas, las discotecas, o los cutres moteles de carretera (estos últimos, lugares horribles donde siempre ocurren las peores cosas inimaginables, gracias Hollywood...) - tiene mucho que ver con la obra de este artista, entre otros.
Un lugar de la cotidianidad y congregación de la masa, pero que al mismo tiempo se convierte en un lugar de nadie, un lugar de paso, un gran tablero de ajedrez donde se repite la misma partida todos los días. Aunque Gursky lo planteé como una demostración de la comunidad humanitaria, de intercambio vinculado a la sociedad tardocapitalista, yo voy a meter aquí la obra de otro artista, me quedo con la estética de Gursky y cojo los conceptos de Doug Aiken en su obra Migration; y quien sabe si de esta mezcla saldría incluso otro arista, el fotógrafo Stephen Shore, quien podría ser la llave para entender lo extraña que me he sentido al verme reflejada en una de las columnas-espejo del super con una botella de té de melocotón en una mano y salsa de soja en la otra.


Migration, AIKEN, 2008.

Migration, AIKEN, 2008.
Me hubiera perdido en mis ojos en ese momento. Y mi cabeza me decía: no vengas sola a estos lugares, mira a tu alrededor. Y mi corazón decía: no sé si quiero, no sé si puedo. Y mi paladar decía: no te olvides del zumo de manzana. Pero eso no es lo peor, la cola del super es la peor parte, allí me han dado ganas de salir corriendo. Colas largas e interminables llenas de familias domingueras, niños que gritan, abuelas charlatanas, y solteros de mirada perdida con raciones individuales que parecen padecer el síndrome de Asperger. Un vacío emocional pero al mismo tiempo un amor a mi soledad, un deseo irrefutable de poseer alas, y pensar: así no por favor, así yo no.


Uncommon places, SHORE.

Uncommon places, SHORE.

He pagado mi té y mi soja y me he ido lo más rápido posible, para evitar que lo inevitable de mi futuro me atrape.Yo no puedo ser de familia dominguera, yo quiero llegar a mi casa y leer en el sofá y acariciar a mi gato; no poner dos lavadoras, ni preparar bocadillos para el cole, ni aguantar el fútbol, es no, por favor.
La próxima vez que me de por echarte de menos procurare tener té en la nevera, y que brille el sol en la calle.



"Ars longa, vita brevis"

martes, 3 de mayo de 2011

EL ARTE QUE NO CONOCIMOS.

Algunos me han debatido que las personas felices pueden crear cosas maravillosas. Lo pongo en duda. No digo que las personas felices no puedan crear, pero tengo por seguro que no pueden crear mejor que una persona infeliz. ¿Por qué? Pues porque se crea del dolor mayoritariamente, para los que les guste y para los que no. El sufrimiento, el abismo, la desesperación, la tristeza, el desconocimiento, y el exceso de conocimiento también, son fuentes de inspiración y de creación artística. Quien es feliz cree que tiene suficiente. Dime, ¿qué necesidad tiene una persona completa, feliz, satisfecha consigo misma y con muchas otras cosas, de ponerse a crear? El artista necesita crear, más allá de un estado anímico, el artista necesita, no es algo que haga por placer únicamente, sino por impulso. Aire para los pulmones.

Esto no es algo que a mi se me antoje, sino que son preguntas que se plantean desde tiempos remotos en el mundo del arte y su teoría. Mezclando el grabado Melancolía de Durero y el libro Nacidos bajo el signo de Saturno de Wittkower, se podría tener una síntesi muy resumida de lo que estoy intentando comentar, suficiente para captar la idea. (Joder, odio los pies de página donde se tiene que poner toda la información como a los niños pequeñitos, en la página concreta donde puedes encontrar la cita...no todo es tan esquemático, exacto y milimétrico! te doy un título y un nombre, investiga!! N.A: esto no va para el lector, es un apunte personal- me han tocado el orgullo-que diría a más de uno en el mundo académico).


Melancolía. DURERO,A.

Nacidos bajo el signo de Saturno. WITTKOWER, R.M
 
Y podría extenderme y este post no se acabaría nunca, y llenar la página entera de referencias bibliográifcas que incluyeran biografías de artistas, obras, citas...pero os dejo que indageis sobre el tema si os interesa, sólo os ofrezco una pincelada, una curiosidad.
Bueno, es más, por favor, ayudarme, dejarme entradas en este post, decirme nombres, nombres de artistas felices, casados, ricos, satisfechos con la vida, razonables, sinceros...y por cada uno que se mecione, seguro que se pueden mencionar no uno, sino tres o más, que estuvieran atormentados, insatisfechos, tristes, melancólicos, hambrientos, desquiciados, desenamorados, suicidas, embriagados, solos, incomprendidos, efermos, en la cárcel incluso.
Genios. A todos ellos, gracias. No me imagino como hubiera sido un mundo, un arte lleno de felicidad, ni me lo quiero imaginar. Ya lo decía el agente Smith en Matrix: " lo intentamos, intentamos crear un mundo donde toda la gente fuera feliz, pero no funcionó, el ser humano necesita de su lado oscuro, del sufrimiento, para poder funcionar".



pd: en el vídeo, me retracto en lo que al romanticismo de Shakespeare se refiere, creo que puede que fuera muchas otras cosas antes que romántico en sí.


"Ars longa, vita brevis"